Colvenz – Colonia de Venezolanos en Colombia

El colegio San Ignacio, junto a la corporación para inmigrantes venezolanos y retornados Colvenz, organizaron el día domingo 20 de junio, en el gimnasio del mismo, una actividad para venezolanos en la que se valora la integración e inclusión al inmigrante.

Sandra Milena, coordinadora del programa formación de liderazgo en la pastoral del colegio San Ignacio, cuenta que durante años han mantenido una relación junto a Colvenz en las acostumbradas campañas de solidaridad que realiza el colegio.

 

En esta oportunidad, los jóvenes que pertenecen a una organización encargada de los Derechos Humanos y refugiados dentro del colegio, decidieron tener un encuentro cercano con los inmigrantes venezolanos. “La idea surgió luego de hacerse la pregunta; ¿Estamos frente a una organización de los Derechos Humanos y refugiados pero aún no hemos tenido contacto con ellos?” Dijo Sandra, quien además agregó que junto a Colvenz, estarán preparando a los jóvenes de San Ignacio en el liderazgo humanitario.

Entre los asistentes a la actividad había refugiados con historias impactantes, quienes salieron huyendo de la crisis. Como una maestra llamada Lucia, quien vivió sus últimos días en Venezuela en medio del hambre y enfermedades.

 

Sin embargo, ese día era para relajarse e integrarse con las actividades que tenían preparadas los coordinadores de Colvenz y la participación especial de Global Shapers, una red global de jóvenes comprometidos con la transformación local.

 

“Celebramos la iniciativa de estas actividades e invitó a que otras organizaciones se sumen a la tarea de llevar integración e inclusión a la población migrante”, fueron las palabras de Andrea, una de las chicas refugiadas que participaba.

 

El día cerró con una actividad dirigida por Global Shapers, un ejercicio psicosocial acompañado por profesionales de psicología. “Está pensada en arteterapia, un ejercicio para tejer, estas son unas mandalas que se llaman ojo de Dios, que lo que hace es que cuenta la historia de las personas que están elaborando el mándala como tal”, dijo Carlos Franco, quien dirigía la actividad.

 

Los organizadores de la actividad dijeron estar satisfechos y motivados a seguir aportando en la realización de actividades trascendentes para refugiados.